viernes, abril 27, 2007
Maldito mail
“Si quieres le compramos algo en plan nosotros.”
Eso dice el mail de la superV. Ha sido el cumpleaños de mi compañero de trabajo. Anoche lo celebró. Invitó a todos los currelas de la promoción. Sólo fuimos dos. De veinticinco currelas de la misma promoción solo fuimos dos.
La superV me pregunta que si no voy a mandar un mail a los 25 para pedir dinero para comprarle algo al cumpleañero. Me quiere endiñar a mi el asunto. Ella ni tan siquiera respondió a la invitación, pero quiere quedar bien. Quiere vivir feliz en su mundo de apariencia.
Sutilmente le respondo que no había pensado nada porque la gente no se había entusiasmado mucho con su celebración. Es una forma de decir que paso de un regalo con sonrisas falsas, paso de aparentar que los 25 currelas nos llevamos estupendamente cuando eso es imposible. Que paso de darle una palmadita en la espalda como felicitación y luego ni tan siquiera acercarme a tomar una cerveza cuando me están invitando.
Pero parece que superV no capta las sutilezas (no me sorprende). Me manda el mail que me acaba de cabrear del todo. “Si quieres le compramos algo en plan nosotros”.
No me gusta nada. En primer lugar el “si quieres”…¿por qué la decisión depende de mi? No es justo que porque me lleve mejor con él tenga la facultad de obligar al resto de currelas a desembolsar dinero cuando a lo mejor no quieren.
Y lo que menos me gusta y más me revienta. “En plan nosotros”. Eso supone que acepto que hay un nosotros y un otros que quedan excluidos. Hay un nosotros del que formo parte sin saberlo, un nosotros que automáticamente supone admitir la existencia de otro grupo antagónico al mío.
Odio los grupos exclusivos. Ese “nosotros” en continua oposición a “ellos”. Yo no formo parte de ningún grupo. Soy uno, individual y no estoy programado para ser ovejilla y que me pastoreen.
Yo soy yo, no me dejo manipular por grupos ni me produce satisfacción ni seguridad sentir que formo parte de un grupo en el que somos todos iguales y homogéneos. No me parezco a nadie tanto como para decir que somos iguales, y menos si de ese grupo forma parte la imbécil de la superV.
¿Cómo devolver el mail sin que me caiga el marrón de comprar algo y sin aceptar que formo parte de “nosotros”?
Le contesto pues en forma de pregunta.
“¿Vosotros queréis comprarle algo?”
Incluso tiene un poco de mala baba. Pero no se da por enterada. Sigue jodiéndome con más mails. Yo solo quiero que lleguen las tres para irme a mi casa. Como me masacre con otro mail voy a tener que mandarla a tomar por culo.
Eso dice el mail de la superV. Ha sido el cumpleaños de mi compañero de trabajo. Anoche lo celebró. Invitó a todos los currelas de la promoción. Sólo fuimos dos. De veinticinco currelas de la misma promoción solo fuimos dos.
La superV me pregunta que si no voy a mandar un mail a los 25 para pedir dinero para comprarle algo al cumpleañero. Me quiere endiñar a mi el asunto. Ella ni tan siquiera respondió a la invitación, pero quiere quedar bien. Quiere vivir feliz en su mundo de apariencia.
Sutilmente le respondo que no había pensado nada porque la gente no se había entusiasmado mucho con su celebración. Es una forma de decir que paso de un regalo con sonrisas falsas, paso de aparentar que los 25 currelas nos llevamos estupendamente cuando eso es imposible. Que paso de darle una palmadita en la espalda como felicitación y luego ni tan siquiera acercarme a tomar una cerveza cuando me están invitando.
Pero parece que superV no capta las sutilezas (no me sorprende). Me manda el mail que me acaba de cabrear del todo. “Si quieres le compramos algo en plan nosotros”.
No me gusta nada. En primer lugar el “si quieres”…¿por qué la decisión depende de mi? No es justo que porque me lleve mejor con él tenga la facultad de obligar al resto de currelas a desembolsar dinero cuando a lo mejor no quieren.
Y lo que menos me gusta y más me revienta. “En plan nosotros”. Eso supone que acepto que hay un nosotros y un otros que quedan excluidos. Hay un nosotros del que formo parte sin saberlo, un nosotros que automáticamente supone admitir la existencia de otro grupo antagónico al mío.
Odio los grupos exclusivos. Ese “nosotros” en continua oposición a “ellos”. Yo no formo parte de ningún grupo. Soy uno, individual y no estoy programado para ser ovejilla y que me pastoreen.
Yo soy yo, no me dejo manipular por grupos ni me produce satisfacción ni seguridad sentir que formo parte de un grupo en el que somos todos iguales y homogéneos. No me parezco a nadie tanto como para decir que somos iguales, y menos si de ese grupo forma parte la imbécil de la superV.
¿Cómo devolver el mail sin que me caiga el marrón de comprar algo y sin aceptar que formo parte de “nosotros”?
Le contesto pues en forma de pregunta.
“¿Vosotros queréis comprarle algo?”
Incluso tiene un poco de mala baba. Pero no se da por enterada. Sigue jodiéndome con más mails. Yo solo quiero que lleguen las tres para irme a mi casa. Como me masacre con otro mail voy a tener que mandarla a tomar por culo.
Etiquetas: trabajo
miércoles, abril 25, 2007
Brownies
Cómo vuelan los brownies. Los brownies se palpan en el ambiente. Uno los siente planear por la oficina, oye el zumbido de su vuelo y agacha la cabeza todavía más contra la pantalla del ordenador para que no le caigan encima.
El ambiente se tensa, la agitación de los jefes va aumentando y los brownies cada vez tienen un mayor tamaño y cada vez planean más raso. Queremos que caigan pero que le salpique a otro la mierda, preferimos mantenernos limpios detrás de la barrera.
Los brownies son armas de doble filo. Todos sabemos que el riesgo es alto, pero que las ganancias pueden ser proporcionales. Existe la posibilidad de que una vez salpicado por la mierda que desprende el brownie al caer sobre tu cabeza, resulte que no es tan grande ni tan apestoso. Puede ser que el brownie sea fácil de controlar y consigas salir airoso de la situación.
Ocurre entonces que uno piensa que ha ganado los favores de los superiores, que son los amos del destino de los brownies y deciden sobre que cabeza deben explotar o sobre cual no. Uno se siente más optimista, se crece ante la adversidad y deja de ver sus propios defectos creyéndose el rey de las virtudes laborales. Se imagina un futuro en el que los brownies no le producen respeto, se imagina salvando a la raza de los currelas de los brownies ofreciéndose siempre voluntario para exterminar al marrón de turno y saliendo siempre victorioso de la adversidad.
En realidad, nuestro currela anónimo actúa así por puro egoísmo. Es la codicia la que mueve su falsa generosidad. Quiere recompensas y no le importará cortar cabezas para obtenerlas. El currela voluntario siempre sueña con sentarse más cerca del jefe y más alto que sus compañeros. Quiere pasta, y la quiere ya.
Es una verdad universal que a nadie le gusta que un marrón le caiga encima, pero también que en lo más profundo de cada currela hay escondido un trepa sin escrúpulos.
Ay, pero pobre el currela trepa que se cree que su dominio de los marrones le proporcionará la posibilidad de acercarse en la jerarquía a los jefes. En la mayoría de las ocasiones, cuando te cae un marrón encima, que lo resuelvas bien no importa para nada. Se te supone. Pero pobre del currela que no sepa manejar su marrón, que sea torpe o que todavía este muy verde para enfrentarse a una horda de brownies; eso podría suponer la condena eterna a ojos de los superiores.
Por eso, todo currela inteligente, con un poco de sentido común, prefiere no arriesgarse ante la posibilidad de medrar un poco en el escalafón laboral. Sabe que está bien en donde está. Sabe por experiencia previa que pocas veces se consigue ascender presentándose como voluntario a combatir brownies. Es mejor sólo enfrentarse a aquellos que el destino te tenga deparados.
Nunca hay que presentarse voluntario. Como nos enseña el chiste; pregunta el teniente en la mili a los soldados nuevos quién sabe escribir. “Yo”, exclama un soldado de entre las filas. “Pues a limpiar letrinas”, le ordena el teniente.
El ambiente se tensa, la agitación de los jefes va aumentando y los brownies cada vez tienen un mayor tamaño y cada vez planean más raso. Queremos que caigan pero que le salpique a otro la mierda, preferimos mantenernos limpios detrás de la barrera.
Los brownies son armas de doble filo. Todos sabemos que el riesgo es alto, pero que las ganancias pueden ser proporcionales. Existe la posibilidad de que una vez salpicado por la mierda que desprende el brownie al caer sobre tu cabeza, resulte que no es tan grande ni tan apestoso. Puede ser que el brownie sea fácil de controlar y consigas salir airoso de la situación.
Ocurre entonces que uno piensa que ha ganado los favores de los superiores, que son los amos del destino de los brownies y deciden sobre que cabeza deben explotar o sobre cual no. Uno se siente más optimista, se crece ante la adversidad y deja de ver sus propios defectos creyéndose el rey de las virtudes laborales. Se imagina un futuro en el que los brownies no le producen respeto, se imagina salvando a la raza de los currelas de los brownies ofreciéndose siempre voluntario para exterminar al marrón de turno y saliendo siempre victorioso de la adversidad.
En realidad, nuestro currela anónimo actúa así por puro egoísmo. Es la codicia la que mueve su falsa generosidad. Quiere recompensas y no le importará cortar cabezas para obtenerlas. El currela voluntario siempre sueña con sentarse más cerca del jefe y más alto que sus compañeros. Quiere pasta, y la quiere ya.
Es una verdad universal que a nadie le gusta que un marrón le caiga encima, pero también que en lo más profundo de cada currela hay escondido un trepa sin escrúpulos.
Ay, pero pobre el currela trepa que se cree que su dominio de los marrones le proporcionará la posibilidad de acercarse en la jerarquía a los jefes. En la mayoría de las ocasiones, cuando te cae un marrón encima, que lo resuelvas bien no importa para nada. Se te supone. Pero pobre del currela que no sepa manejar su marrón, que sea torpe o que todavía este muy verde para enfrentarse a una horda de brownies; eso podría suponer la condena eterna a ojos de los superiores.
Por eso, todo currela inteligente, con un poco de sentido común, prefiere no arriesgarse ante la posibilidad de medrar un poco en el escalafón laboral. Sabe que está bien en donde está. Sabe por experiencia previa que pocas veces se consigue ascender presentándose como voluntario a combatir brownies. Es mejor sólo enfrentarse a aquellos que el destino te tenga deparados.
Nunca hay que presentarse voluntario. Como nos enseña el chiste; pregunta el teniente en la mili a los soldados nuevos quién sabe escribir. “Yo”, exclama un soldado de entre las filas. “Pues a limpiar letrinas”, le ordena el teniente.
Etiquetas: trabajo
sábado, abril 21, 2007
Desnudas
Anoche la cadena de televisión Cuatro estrenó el programa “Desnudas”, programa en el que una serie de profesionales liderados por el estilista Oliva enseñan a una mujer a sentirse contenta y feliz con su cuerpo, le enseñan trucos para vestirse, maquillarse, peinarse, etc. de tal manera que se potencien sus virtudes y no se enseñen los defectos de su cuerpo.
Por contenido es un programa que va a competir directamente con el show de Antena 3 “Cambio Radical”. Se emiten en días distintos, el primero el viernes y el último el domingo, pero los dos reflejan perfectamente las diferentes vías que hay para que una persona se enfrente a los complejos físicos que pueda tener.
Yo soy partidario del enfoque que da al problema “Desnudas”. El modista, que lo hace fenomenal en el programa, consigue acercarse a la persona, se muestra cariñoso y no se cansa de repetir lo guapa que es y lo más guapa todavía que va a estar. De esta forma consigue que la mujer se desinhiba y se olvide de sus miedos.
Sin cirugías agresivas consiguen que la mujer del inicio y la mujer del final apenas se parezcan. Pero consiguen algo más importante que ese cambio físico, consiguen que la mujer olvide sus complejos, que sea feliz consigo misma, la enseñan a mostrar todo lo bueno que tiene, consiguen que vuelva a sonreir y a ser feliz. Todo sin ayuda de la cirugía estética.
Además, la enseñan que ropa la favorece y cual no en tiendas que son accesibles para la mayoría, no en tiendas de diseñadores exclusivos, sino como en el caso de ayer en Sfera y tiendas por el estilo.
Sin embargo, estoy totalmente en contra del mensaje que lanza “Cambio Radical”. En ese programa no te ayudan a superar tus complejos, sino que los destrozan, te cambian por otra persona. Mediante operaciones agresivas cambian tu nariz, tu barbilla, tus pómulos, todo….con operaciones que requieren semanas para que el cuerpo se recupere. Operaciones de quirófano donde ya se ha dado más de un caso de fallecimiento del paciente.
Además, el programa de Antena 3 es más light que el de la versión americana, donde te muestran imágenes del paciente después de la operación y se le ve con sangre, con pus y te muestran verdaderamente como el cuerpo sufre ese tipo de operaciones. En la versión española venden que no es agresivo y que cualquier persona lo puede soportar y que es lo mejor que te puede ocurrir.
Pero eso no es cierto, el mensaje que se manda a los teleespectadores es que si no te gusta algo lo mejor es cambiarlo radicalmente por otra cosa, no importa el precio. Y no creo que eso sirva para que los concursantes del programa se sienta feliz a la larga.
El proverbio chino dice que si quieres ayudar a un pobre no le des de comer sino que le enseñes a pescar. Estamos en el mismo caso, si tiene complejos esa persona no le operes para que se le quiten esos complejos y le afloren otros, sino que enséñale a ser feliz, a ver lo guapo/a que es y a como mostrar esa belleza interior que todos tenemos.
Aparte de que las operaciones de quirófano innecesarias me parece jugársela sin motivo. Entrar en un quirófano es algo complicado, tiene que ser por algo necesario, puede surgir cualquier complicación que acabe en desgracia. Pero la gente se lo toma a la ligera, como si fuera igual que comprar un refresco. Si uno no lleva el coche al taller más que cuando está averiado o algo no funciona, ¿por qué jugamos tan a la ligera con nuestro cuerpo?
Por contenido es un programa que va a competir directamente con el show de Antena 3 “Cambio Radical”. Se emiten en días distintos, el primero el viernes y el último el domingo, pero los dos reflejan perfectamente las diferentes vías que hay para que una persona se enfrente a los complejos físicos que pueda tener.
Yo soy partidario del enfoque que da al problema “Desnudas”. El modista, que lo hace fenomenal en el programa, consigue acercarse a la persona, se muestra cariñoso y no se cansa de repetir lo guapa que es y lo más guapa todavía que va a estar. De esta forma consigue que la mujer se desinhiba y se olvide de sus miedos.
Sin cirugías agresivas consiguen que la mujer del inicio y la mujer del final apenas se parezcan. Pero consiguen algo más importante que ese cambio físico, consiguen que la mujer olvide sus complejos, que sea feliz consigo misma, la enseñan a mostrar todo lo bueno que tiene, consiguen que vuelva a sonreir y a ser feliz. Todo sin ayuda de la cirugía estética.
Además, la enseñan que ropa la favorece y cual no en tiendas que son accesibles para la mayoría, no en tiendas de diseñadores exclusivos, sino como en el caso de ayer en Sfera y tiendas por el estilo.
Sin embargo, estoy totalmente en contra del mensaje que lanza “Cambio Radical”. En ese programa no te ayudan a superar tus complejos, sino que los destrozan, te cambian por otra persona. Mediante operaciones agresivas cambian tu nariz, tu barbilla, tus pómulos, todo….con operaciones que requieren semanas para que el cuerpo se recupere. Operaciones de quirófano donde ya se ha dado más de un caso de fallecimiento del paciente.
Además, el programa de Antena 3 es más light que el de la versión americana, donde te muestran imágenes del paciente después de la operación y se le ve con sangre, con pus y te muestran verdaderamente como el cuerpo sufre ese tipo de operaciones. En la versión española venden que no es agresivo y que cualquier persona lo puede soportar y que es lo mejor que te puede ocurrir.
Pero eso no es cierto, el mensaje que se manda a los teleespectadores es que si no te gusta algo lo mejor es cambiarlo radicalmente por otra cosa, no importa el precio. Y no creo que eso sirva para que los concursantes del programa se sienta feliz a la larga.
El proverbio chino dice que si quieres ayudar a un pobre no le des de comer sino que le enseñes a pescar. Estamos en el mismo caso, si tiene complejos esa persona no le operes para que se le quiten esos complejos y le afloren otros, sino que enséñale a ser feliz, a ver lo guapo/a que es y a como mostrar esa belleza interior que todos tenemos.
Aparte de que las operaciones de quirófano innecesarias me parece jugársela sin motivo. Entrar en un quirófano es algo complicado, tiene que ser por algo necesario, puede surgir cualquier complicación que acabe en desgracia. Pero la gente se lo toma a la ligera, como si fuera igual que comprar un refresco. Si uno no lleva el coche al taller más que cuando está averiado o algo no funciona, ¿por qué jugamos tan a la ligera con nuestro cuerpo?
martes, abril 17, 2007
Las mentiras del Metro de Madrid
Raro es el día que no leemos en los periódicos que el alcalde de Madrid o la presidenta de la Comunidad no han inaugurado una nueva estación de Metro o que van a prestar un nuevo servicio. En todos los discursos resaltan que el Metro de Madrid es el mejor del mundo y que cada vez presta un servicio mejor a los ciudadanos.
Es cierto que tras las nuevas ampliaciones va a ser el tercer Metro más grande del mundo, sólo después del de New York y Moscú. Pero esa no es toda la verdad. La verdad es que desde hace unos años atrás el dinero se gasta en nuevas estaciones y no en el mantenimiento del Metro.
En los últimos cinco años han descendido brutalmente el número de empleados destinados a este fin. También han disminuido el tiempo concedido a los mecánicos para que reparen las averías. Antes tenían un tiempo estimado de reparación de 30 días y ahora apenas de 1 ó 2 días.
Es tan poca la preocupación que tienen por arreglar los daños que hay tramos de la línea circular que se inunda cada vez que llueve y siguen sin hacer nada, será porque confían en que continúe el tiempo de sequía.
Además, anuncian a bombo y platillo que están renovando los trenes y vagones de las diferentes líneas, pero quedan líneas en las que los trenes no son todavía automáticos y el freno tiene que ser activado manualmente por el conductor con un sistema que da muchos problemas.
Ahora que llega el calor también hay que recordar que en ocasiones la sensación térmica en andenes y vagones supera los 30 grados; aunque anuncian siempre que los nuevos trenes tienen aire acondicionado muchísimas ocasiones no los encienden. Todavía no sabemos por qué.
¿Por qué se centran únicamente en inaugurar trenes y estaciones? Porque esas son las cosas que implican fotos y falsos méritos delante de los periodistas y los futuros votantes.
Esa es la pura verdad, nos mienten por nuestros votos, por el poder. Por verse en esas ridículas fotos en las que salen todos los políticos en traje y con cascos de colores chillones.
Lo peor de todo es que nos creemos todo lo que dicen, que nos parece maravilloso que cambien el plano e inauguren una estación nueva y se nos olvida que tenemos que ir todas las mañanas apelotonados en los vagones después de esperar durante minutos que no pasan (porque trucan el contador de los minutos que quedan, comprobado en persona, en ocasiones un minuto ha durado hasta dos minutos y media), y volvemos a votarles.
¡¡Recordad todo esto el día de las elecciones!!
Es cierto que tras las nuevas ampliaciones va a ser el tercer Metro más grande del mundo, sólo después del de New York y Moscú. Pero esa no es toda la verdad. La verdad es que desde hace unos años atrás el dinero se gasta en nuevas estaciones y no en el mantenimiento del Metro.
En los últimos cinco años han descendido brutalmente el número de empleados destinados a este fin. También han disminuido el tiempo concedido a los mecánicos para que reparen las averías. Antes tenían un tiempo estimado de reparación de 30 días y ahora apenas de 1 ó 2 días.
Es tan poca la preocupación que tienen por arreglar los daños que hay tramos de la línea circular que se inunda cada vez que llueve y siguen sin hacer nada, será porque confían en que continúe el tiempo de sequía.
Además, anuncian a bombo y platillo que están renovando los trenes y vagones de las diferentes líneas, pero quedan líneas en las que los trenes no son todavía automáticos y el freno tiene que ser activado manualmente por el conductor con un sistema que da muchos problemas.
Ahora que llega el calor también hay que recordar que en ocasiones la sensación térmica en andenes y vagones supera los 30 grados; aunque anuncian siempre que los nuevos trenes tienen aire acondicionado muchísimas ocasiones no los encienden. Todavía no sabemos por qué.
¿Por qué se centran únicamente en inaugurar trenes y estaciones? Porque esas son las cosas que implican fotos y falsos méritos delante de los periodistas y los futuros votantes.
Esa es la pura verdad, nos mienten por nuestros votos, por el poder. Por verse en esas ridículas fotos en las que salen todos los políticos en traje y con cascos de colores chillones.
Lo peor de todo es que nos creemos todo lo que dicen, que nos parece maravilloso que cambien el plano e inauguren una estación nueva y se nos olvida que tenemos que ir todas las mañanas apelotonados en los vagones después de esperar durante minutos que no pasan (porque trucan el contador de los minutos que quedan, comprobado en persona, en ocasiones un minuto ha durado hasta dos minutos y media), y volvemos a votarles.
¡¡Recordad todo esto el día de las elecciones!!
Etiquetas: crítica social
lunes, abril 16, 2007
El buen pastor
Reparto
Jeff Applegate, Tammy Blanchard, Angelina Jolie, Billy Crudup, Robert De Niro, Vladimir Mashkov, Joe Pesci, Douglas J. Aguirre, Patrick Wilson, Matt Damon
Director
Robert De Niro
Estreno: miércoles 4 abril 2007
Género: Acción
País :EE.UU.
Distribuidora
United International Pictures
Película larga y lenta de Robert de Niro en la que narra la historia del que se supone es uno de los fundadores de la CIA. La trama abarca desde que ingresa en una hermandad secreta "Skull and Bones" hasta que funda la agencia, pero la película se centra principalmente en las experiencias del protagonista durante la II Guerra Mundial enfrentándose a los alemanes con el contraespionaje y posteriormente en la Guerra Fría contra los rusos con Bahía de Cochinos de fondo.
De Niro pretende en el film mostrarnos el cambio ideológico del personaje y el cambio de la orientación politica producida en el mundo en dichos años. Intenta mostrarnos una persona que tiene que hacer enormes sacrificios y ver sufrir a su familia y verse rodeado de un mundo "laboral" en el que no hay ni amigos ni favores.
Esa es la intención del director. El resultado es una película plana, larga, lenta y pesada. Un film que no consigue conectar con el espectador, que quiere abarcar mucho y al final no consigue profundizar en ningún aspecto.
Ciertamente es un personaje que podría dar mucho juego, un espía de la Guerra Fría con una infinitud de contradicciones y decisiones difíciles que marcan el desarrollo de la historia de su país y su propia familia. Pero lamentablemente una vez más Matt Damon no está a la altura del personaje y se ve totalmente superado por el papel. Un actor que no consigue transmitir nada a la cámara y que hacen que las escenas cargadas de primeros planos sean un auténtico sopor.
Una película, en definitiva, larga y lenta con muchas pretensiones pero que por querer abarcar mucho no consigue transmitirnos nada en profundidad. Ya lo dice el refrán: "Quien mucho abarca poco aprieta."
Etiquetas: cine
domingo, abril 15, 2007
Sábado en familia.
Con motivo del inicio de la temporada taurina de primavera en la provincia de Guadalajara nos pasamos el sábado en Brihuega, que es donde iba a tener lugar la corrida con 6 toros 6 de Domecq que torearon Enrique Ponce (una oreja), "el Juli" y Cayetano ( dos orejas y salida por la puerta grande).
Llegamos a Brihuega a eso de las once de la mañana, justo para dar una vuelta por el pueblo y sus jardines y comprar productos típicos de la zona como queso, chorizo, salchichón y miel.
Después de recorrer el pueblo y visitar la plaza de toros retrocedimos hacia Guadalajara para comer en Los Faroles. Comida fantástica y reconocer que el servicio fue casi mejor que la comida, que era algo bien difícil. Para compartir ensalada de roquefort con frutos secos y Cebolla rellena de carne (deliciosa) y yo tome de segundo un entrecot de ternera. No podía faltar el postre típico, unos borrachos de Guadalajara.
Tras la comida regreso a Brihuega para dar un paseo por los jardines de los enamorados (preciosos), en lo alto del pueblo y pudimos observarlo en su conjunto. Un par de copas de sobremesa y ya nos dirigimos a la plaza para contemplar la faena.
La plaza esta llena a rebosar. Los toreros nos deleitaron con pases estupendos pero el problema es que los toros adolecieron todos de ser débiles de los cuartos delanteros así que la faena se vió un poco deslucida. Aún así el público lo pasó en grande.
Ya anocheciendo vuelta a Madrid en coche, parando otra vez en Los Faroles para cenar un picoteo viendo como el Racing ganaba 2-1 al Real Madrid y comprar un par de cajas de borrachos.
¡¡¡¡Me encantan los días familiares!!!!
Etiquetas: vacaciones
viernes, abril 13, 2007
Hasta los mismísimos del párroco (cursillo prematrimonial y 4)
Siempre he pensado que las personas que dicen que odian a Dios o que jamás pisarían una iglesia ni hartos de vino es porque se había encontrado con alguien que profesa esa religión y que ese alguien tenía que ser de pensamiento ultraconservador, sumamente arcaico en sus planteamientos y totalmente desconocedor de como es la vida en el mundo actual.
Desde esta semana estoy totalmente convencido de que tiene que ser ese el motivo. Siempre he percibido a la Iglesia como una institución de otro tiempo, incapaz de adaptarse a los nuevos valores, totalmente conservadora y reticente a que la gente sea feliz prefiriendo siempre amenazarnos con su doctrina que enseñarnos los mensajes positivos que la vida de Cristo pueda tener; escogiendo siempre su ejemplo para terminar cualquier sermón con amenazas de todo tipo sobre lo infeliz que seremos nosotros y los que nos rodean si el domingo no vamos a misa.
Después de aguantar perlas de todos los colores esta semana de cursillo prematrimonial en sesiones que rozan lo insufrible por su duración ( desde las 20:30 hasta las 23:00 como mínimo), ayer el párroco de otro siglo volvió a vomitar pensamientos machistas y ofensivos para las mujeres y que parecían sacados de otro siglo.
Tras aguantar afirmaciones tan hipócritas y demagógicas como que la Iglesia no está en contra de los homosexuales sino en contra de que ejerzan su homosexualidad ayer algunos tuvimos que agarrarnos a las sillas para no levantarnos e irnos de la sala.
La “exposición” de ayer era sobre la convivencia en pareja y la sexualidad. Primero empezó con ejemplos que hacían que un 90% de los matrimonios actuales fracasaran en su convivencia. Los 3 primeros puntos de su lista eran los bares, el alcoholismo y las drogas. Coincido en el segundo y el tercero con él plenamente, me imagino que como casi todo el mundo. Lo realmente quijotesco de la exposición comenzó en ese momento, puesto que señaló en los puestos 4 y 5 la caza y la pesca. Si, yo llevo todo el día pensando en ello y no consigo relacionar la caza y la pesca con que mi matrimonio vaya a fracasar.
Los malos tratos aparecían en el puesto decimotercero, por detrás de grandes problemas como los toros, el juego, el dinero….Sin embargo el momento espectacular de la noche llegó con un punto que considera muy peligroso para la convivencia matrimonial, el trabajo.
Evidentemente el trabajo ocupa gran parte de nuestras vidas y afecta no solo a nuestra convivencia sino a casi todos los aspectos que conforman nuestra forma de vivir. Su planteamiento fue el siguiente; el párroco de las narices está en contra de que los dos miembros de la pareja trabajen, para darse un aire de moderno dijo que no especifica en contra del trabajo de quién pero seguidamente defendió que los males de la familia hoy es que la mujer trabaja fuera de casa, que como mucho debía trabajar 2 ó 3 horas al día fuera de casa como dependienta en alguna tienda.
Tal barbaridad acabó de rematarla diciendo que le parecía fatal que las mujeres llevaran hoy pantalones o vaqueros, que debían de ir con falda o vestido; que si no se cuidaban por fuera como se iban a cuidar por dentro.
Sobre la sexualidad únicamente destacar que comentó que los que más sabían de sexo eran los párrocos. Ahora si que me tomo en serio las noticias de párrocos y sacerdotes pederastas; en algún lado lo habrán aprendido, ¿no?.
Desde esta semana estoy totalmente convencido de que tiene que ser ese el motivo. Siempre he percibido a la Iglesia como una institución de otro tiempo, incapaz de adaptarse a los nuevos valores, totalmente conservadora y reticente a que la gente sea feliz prefiriendo siempre amenazarnos con su doctrina que enseñarnos los mensajes positivos que la vida de Cristo pueda tener; escogiendo siempre su ejemplo para terminar cualquier sermón con amenazas de todo tipo sobre lo infeliz que seremos nosotros y los que nos rodean si el domingo no vamos a misa.
Después de aguantar perlas de todos los colores esta semana de cursillo prematrimonial en sesiones que rozan lo insufrible por su duración ( desde las 20:30 hasta las 23:00 como mínimo), ayer el párroco de otro siglo volvió a vomitar pensamientos machistas y ofensivos para las mujeres y que parecían sacados de otro siglo.
Tras aguantar afirmaciones tan hipócritas y demagógicas como que la Iglesia no está en contra de los homosexuales sino en contra de que ejerzan su homosexualidad ayer algunos tuvimos que agarrarnos a las sillas para no levantarnos e irnos de la sala.
La “exposición” de ayer era sobre la convivencia en pareja y la sexualidad. Primero empezó con ejemplos que hacían que un 90% de los matrimonios actuales fracasaran en su convivencia. Los 3 primeros puntos de su lista eran los bares, el alcoholismo y las drogas. Coincido en el segundo y el tercero con él plenamente, me imagino que como casi todo el mundo. Lo realmente quijotesco de la exposición comenzó en ese momento, puesto que señaló en los puestos 4 y 5 la caza y la pesca. Si, yo llevo todo el día pensando en ello y no consigo relacionar la caza y la pesca con que mi matrimonio vaya a fracasar.
Los malos tratos aparecían en el puesto decimotercero, por detrás de grandes problemas como los toros, el juego, el dinero….Sin embargo el momento espectacular de la noche llegó con un punto que considera muy peligroso para la convivencia matrimonial, el trabajo.
Evidentemente el trabajo ocupa gran parte de nuestras vidas y afecta no solo a nuestra convivencia sino a casi todos los aspectos que conforman nuestra forma de vivir. Su planteamiento fue el siguiente; el párroco de las narices está en contra de que los dos miembros de la pareja trabajen, para darse un aire de moderno dijo que no especifica en contra del trabajo de quién pero seguidamente defendió que los males de la familia hoy es que la mujer trabaja fuera de casa, que como mucho debía trabajar 2 ó 3 horas al día fuera de casa como dependienta en alguna tienda.
Tal barbaridad acabó de rematarla diciendo que le parecía fatal que las mujeres llevaran hoy pantalones o vaqueros, que debían de ir con falda o vestido; que si no se cuidaban por fuera como se iban a cuidar por dentro.
Sobre la sexualidad únicamente destacar que comentó que los que más sabían de sexo eran los párrocos. Ahora si que me tomo en serio las noticias de párrocos y sacerdotes pederastas; en algún lado lo habrán aprendido, ¿no?.
jueves, abril 12, 2007
Cursillo prematrimonial y III
Ayer fue el tercer día consecutivo de cursillo prematrimonial y sin duda fue el peor de ellos. En un principio la charla iba a darla otro matrimonio pero faltaron y vino otra vez el temido párroco.
Hasta las once de la noche nos tuvo aguantando una serie de sinsentidos sobre la vida en matrimonio y la forma de practicar el catolicismo. Se suponía que se iban a tratar los temas del matrimonio católico, el civil, la separación, el divorcio y la anulación matrimonial.
Obviamente a sus ojos lo único válido es el matrimonio católico. Hasta tal punto que para él el matrimonio civil es pecado mortal. Si, pecado mortal. Igualito que matar a otra persona o violarla o torturarla.
No tengo mucho tiempo así que tampoco entraré en detalles de todo lo que dijo. Ya me aburrí yo bastante como para encima aburrir otra vez a quien lea esto. Solamente quiero repasar otras perlas que soltó por su boquita:
- la iglesia no está en contra de los homosexuales. Está en contra de que practiquen su homosexualidad. (Brillante la frase, es como decir que no está en contra de los preservativos, sino en contra de que la gente los use).
- la iglesia no se alía ni con el dinero ni con el poder.
Lo mejor es que encima había otra cabeza de chorlito, por ser suave, que dijo que la fe tenía que ser privada porque la Iglesia ya no recibía dinero público. Hay gente que parece que vive en un mundo paralelo.
Hasta las once de la noche nos tuvo aguantando una serie de sinsentidos sobre la vida en matrimonio y la forma de practicar el catolicismo. Se suponía que se iban a tratar los temas del matrimonio católico, el civil, la separación, el divorcio y la anulación matrimonial.
Obviamente a sus ojos lo único válido es el matrimonio católico. Hasta tal punto que para él el matrimonio civil es pecado mortal. Si, pecado mortal. Igualito que matar a otra persona o violarla o torturarla.
No tengo mucho tiempo así que tampoco entraré en detalles de todo lo que dijo. Ya me aburrí yo bastante como para encima aburrir otra vez a quien lea esto. Solamente quiero repasar otras perlas que soltó por su boquita:
- la iglesia no está en contra de los homosexuales. Está en contra de que practiquen su homosexualidad. (Brillante la frase, es como decir que no está en contra de los preservativos, sino en contra de que la gente los use).
- la iglesia no se alía ni con el dinero ni con el poder.
Lo mejor es que encima había otra cabeza de chorlito, por ser suave, que dijo que la fe tenía que ser privada porque la Iglesia ya no recibía dinero público. Hay gente que parece que vive en un mundo paralelo.
martes, abril 10, 2007
Cursillo Prematrimonial 1 y 2
Hoy hemos asistido a la segunda charla del cursillo prematrimonial. Ha sido bastante más interesante que la de ayer, vino una pareja a comentarnos los problemas que podían surgir durante el matrimonio y a alertarnos sobre aspectos importantes que debíamos tener decididos antes de casarnos.
Era un matrimonio que lleva 27 años de casados. La charla estuvo entretenida, se habló de verdad de aspectos que están dentro de lo que es la vida en pareja, de cuando nazcan los niños, de la convivencia, de aceptar al otro, etc....
Pero lo que no tuvo nombre fue lo de ayer. Hasta las once pasadas de la noche nos tuvo el parroco aguantando una charla que no tenía nada que ver ni con el matrimonio ni con la pareja ni casi ni con la religión. Basándose en deducciones de una simplicidad insultante y en noticias de periódicos tan rigurosos como La Razón y El Mundo vino a decir que el matrimonio se apoya en tres patas: la convivencia, la sexualidad y la religión.
La conclusión es asombrosa, resulta que el 95% de las parejas han fracasado en la convivencia porque el hombre se va de prostitutas ( según el parroco el 80% de los hombres casados van regularmente de putas), además la sexualidad es un fracaso también porque a las mujeres les dan asco sus maridos en la cama y la religión también es otro estrepitoso fracaso porque no vamos a misa. Vamos, todo profundamente analizado.
Y siempre la duda de que por qué ese parroco que se supone que nunca ha vivido en pareja ni nada de nada sabe tanto de la vida matrimonial, de los secretos de convivir con otra persona a la que se ama. Misterio divino será.
lunes, abril 09, 2007
¡¡¡¡¡Me cagüe en....!!!!!
Hoy tengo una entrada breve pero llena de mala ostia. Resulta que para casarse por la Iglesia es mentira que todo sean facilidades. Se quejan de que cada vez son menos las parejas que se casan según el rito cristiano y que ello conlleva a que la familia vaya a desaparecer y que vivamos en un mundo sin valores....y todo es mentira.
Para casarse por la Iglesia hay que sortear un montón de obstáculos, muchos más que por lo Civil. Y además, se aseguran hacerte un lavado de cerebro que te cagas patas abajo.
Hoy estoy de mal humor porque que me toca ir al primer día del cursillo prematrimonial aunque no se que me pueden enseñar cuando llevo un año y medio viviendo con mi novia.
En la entrevista el parroco soltó perlas de que la gente se divorciaba porque no iba a misa y que desde ahora hasta la boda mi novia y yo debíamos empezar a dormir separados.
¡Con la Iglesia hemos ido a topar, Sancho!
Os tendré informados de las perlas que suelte hoy el parroco en el cursillo.
lunes, abril 02, 2007
Tell me why I don´t like mondays
Lunes.
El peor día de la semana.
Que sea lunes supone que tienes que enfrentarte otra vez con el trabajo, la escuela, las clases, las obligaciones. Tras dos días de fiesta, de relax, de diversión, de hacer lo que te venga en gana tienes que atender otra vez todo lo que te está impuesto en esta vida. Para mayor desánimo, atender las obligaciones ocupa la mayor parte de nuestra vida. Tenemos dos días de permiso por cinco de pringar, totalmente desproporcionado.
El lunes todo cuesta el doble. Todo nos pone de peor humor. Cuesta arrancar, madrugar el primer día de la semana, el primer madrugón, la primera clase, la primera reunión, el primer atasco, el primer marrón en el trabajo, el primer día sin siesta. Todo es una mierda cuando es lunes.
Llegas de tan mal humor que no quieres que nadie te hable en el trabajo, ni que te desee los buenos días. Siempre hay un graciosillo que se despierta con las pilas puestas y que es tan memo que llega de buen humor a la oficina. Es el típico plasta que está descansado porque tiene una vida tan vacía y tan aburrida que se acuesta a las diez de la noche todos los días, tanto si es sábado como si es martes. Es tan triste que ni tan siquiera se engancha a los seriales de la televisión. Ese es el que más ganas dan de reventarle la cabeza para quitarte todo el mal humor que llevas dentro.
Y todas esas sensaciones se multiplican por mil cuando encima es lunes de semana santa, cuando todo el mundo está de vacaciones y a ti te ha tocado quedarte pringando en el trabajo. Lo que más jode no es que tengas que estar sentado delante del ordenador haciendo el canelo, sino que casi todos tus conocidos están haciendo el huevo; además, en nuestra cabeza imaginamos que se lo están pasando como nadie, que están teniendo el mejor tiempo que nunca se haya recordado en estas fechas, que están en la playa, que los solteros están ligando con las tías más buenas, que los que van en pareja están en el mejor hotel que recuerdes con una piscina de lujo,…
Lo que más jode es que encima de que ya es jodido un lunes de semana santa nuestra cabeza se divierte complicándonos el día con semejantes imaginaciones. Sé que los demás se lo están pasando mejor en mi mente que en sus vacaciones, pero no puedo dejar de imaginármelo.
¡¡Cómo odio los lunes!!
El peor día de la semana.
Que sea lunes supone que tienes que enfrentarte otra vez con el trabajo, la escuela, las clases, las obligaciones. Tras dos días de fiesta, de relax, de diversión, de hacer lo que te venga en gana tienes que atender otra vez todo lo que te está impuesto en esta vida. Para mayor desánimo, atender las obligaciones ocupa la mayor parte de nuestra vida. Tenemos dos días de permiso por cinco de pringar, totalmente desproporcionado.
El lunes todo cuesta el doble. Todo nos pone de peor humor. Cuesta arrancar, madrugar el primer día de la semana, el primer madrugón, la primera clase, la primera reunión, el primer atasco, el primer marrón en el trabajo, el primer día sin siesta. Todo es una mierda cuando es lunes.
Llegas de tan mal humor que no quieres que nadie te hable en el trabajo, ni que te desee los buenos días. Siempre hay un graciosillo que se despierta con las pilas puestas y que es tan memo que llega de buen humor a la oficina. Es el típico plasta que está descansado porque tiene una vida tan vacía y tan aburrida que se acuesta a las diez de la noche todos los días, tanto si es sábado como si es martes. Es tan triste que ni tan siquiera se engancha a los seriales de la televisión. Ese es el que más ganas dan de reventarle la cabeza para quitarte todo el mal humor que llevas dentro.
Y todas esas sensaciones se multiplican por mil cuando encima es lunes de semana santa, cuando todo el mundo está de vacaciones y a ti te ha tocado quedarte pringando en el trabajo. Lo que más jode no es que tengas que estar sentado delante del ordenador haciendo el canelo, sino que casi todos tus conocidos están haciendo el huevo; además, en nuestra cabeza imaginamos que se lo están pasando como nadie, que están teniendo el mejor tiempo que nunca se haya recordado en estas fechas, que están en la playa, que los solteros están ligando con las tías más buenas, que los que van en pareja están en el mejor hotel que recuerdes con una piscina de lujo,…
Lo que más jode es que encima de que ya es jodido un lunes de semana santa nuestra cabeza se divierte complicándonos el día con semejantes imaginaciones. Sé que los demás se lo están pasando mejor en mi mente que en sus vacaciones, pero no puedo dejar de imaginármelo.
¡¡Cómo odio los lunes!!
